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Periodismo y Política: Amigos y Rivales

Reporteo y texto: Jimmy Viera Carrión, estudiante de Periodismo Universidad Academia de Humanismo Cristiano.

Fotografías: Patricio Muñoz


“A tablero vuelto” se realizó el Seminario: “Periodismo y Política en Chile”, organizado por el Consejo Metropolitano y la Escuela de Periodismo de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano.

 

 

 


Los periodistas Nelly Yáñez y Jorge Andrés Richards, junto al cientista político Patricio Navia, fueron los protagonistas de un apasionado debate que fue conducido por nuestro vicepresidente, Renato Leyton, ante un Auditórium lleno de público en la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, el pasado 5 de junio. Entre los presentes destacaba el Presidente del Colegio de Periodistas, Luís Conejeros; el Presidente del Consejo Metropolitano, Patricio Martínez Torres, y la directora de la Escuela de Periodismo de esa casa de estudios, Juanita Rojas. Participaron además consejeros metropolitanos, periodistas de distintas generaciones y estudiantes de periodismo y otras carreras.

El encuentro buscó reflexionar acerca de las características del periodismo y la política en el Chile de hoy, en el contexto de un año electoral. El debate fue intenso y apasionado, y se paseó por distintos temas, tales como la relación entre el periodista y su fuente, el pluralismo (o no) de los medios, la formación de los periodistas en las actuales escuelas universitarias, la independencia editorial, los nuevos medios como los blogs, entre otros.

El primero en abrir los fuegos fue Patricio Navia, quien en un estilo muy directo, mostró claramente su postura en la conversación. Habló de las relaciones de poder que hay entre políticos y periodistas y viceversa, entre estos últimos con editores o directores de medios, criticando la “baja autoestima” del periodista frente al poder: “Los propios periodistas cuestionan la legitimidad de sus pares y ven a los demás como entes superiores, llámese abogados o cientistas políticos y no se sienten participes de la transformación de cambios sociales. Hay relaciones asimétricas de poder y que hacen que tener una grabadora, un lápiz o una libreta no termine por asustar a nadie”, afirmó.

Nelly Yáñez en tanto, se refirió a que los medios se enfrentan día a día a un televidente o lector que cuestiona la veracidad de la información, además de la diversidad y competencia de medios dada por la existencia de Internet. “Tenemos receptores muy atentos a cualquier manipulación, son muy suspicaces a sus emisores (…) En democracia, no se puede imponer una sola verdad y es muy difícil comunicar una realidad que no existe, por eso no se manipula tanto de acuerdo a la tendencia del medio, en este caso de derecha (…) Por eso el “ciudadano reportero”, que tiene una página web o un blog, es capaz de contrarrestar nuestra información”. También la periodista se refirió a que los periodistas tiene que tener una distancia con sus fuentes: “Hay una dependencia con las fuentes políticas, por esto lo mejor es tomar distancia, no ser amigos de las fuentes, tener una buena relación eso sí, porque estamos en polos opuestos”, señaló.

Jorge Andrés Richards por su parte, recordó el periodismo de ayer y hoy, muy diferentes según sus palabras. Como el “de trinchera” que había antes de 1973, donde existía representatividad de las tres miradas que imperaban en el país en la pluralidad de los medios. Luego recordó las publicaciones en contra de la dictadura, como las revistas Análisis y Apsi, donde periodistas y políticos estaban en la misma trinchera: “En los 90, Copesa y El Mercurio se salvaron económicamente. Llegó la democracia y nos quedamos sólo en sueños con la pluralidad de la información, porque hoy no hay espacio. La Concertación no tiene una política sobre los medios de comunicación, si hasta Televisión Nacional de Chile, el canal de todos los chilenos, se financia como uno privado”.

Patricio Navia plasmó la parte más sabrosa del encuentro, cuando le respondió irónicamente a Jorge Andrés Richards sobre la nostalgia del periodismo de antaño: “¿Estamos en 1988 o en el 2008? Basta de mirar hacía el pasado, si ya nos dieron la democracia. Hay que mirar hacia el futuro. Si seguimos lamentándonos que cerró La Época o que cerró Análisis, no vamos a llegar a ninguna parte”. Richards respondía: “Espero que la gente no pierda la memoria y no vuelvan a pasar las mismas cosas horripilantes que pasaron el año 73”.

El público presente tuvo también su oportunidad de intervenir y debatir acerca de, por ejemplo, el rol de las Escuelas de Periodismo, reprochándose que aunque existen cincuenta escuelas en todo Chile, predomina una pasividad crítica en el tema de la concentración de la propiedad de los medios en manos de sectores identificados con la derecha política. Además, se criticó duramente por un lado la forma de ingreso de los estudiantes, por el bajo puntaje y la mala calidad de las mallas curriculares. “La cantidad de periodistas pésimos que salen de las universidades es inquietante, además no tienen capacidad analítica y sólo son dactilógrafos o copian y pegan la información. Así sólo van a ganar 300 lucas”, señaló Patricio Navia, aludiendo a la mala fama que se ha hecho la profesión.

Finalmente se sacó en conclusión: se necesita una mejor calidad docente, que el periodismo y la política democrática que estuvieron del mismo lado de la dictadura, ahora en democracia deben estar en diferentes roles y que los medios no debieran ser medios ante el poder. Y que aunque hay una apertura a los espacios alternativos en Internet, en palabras de Jorge Andrés Richards “no hay derecho que un país como este, no tenga más diversidad y pluralidad de prensa. Lo que ha faltado es la voluntad política para que se generaran nuevos medios y esta debacle se está viendo en los diarios y en la televisión obscenamente a diario”.

Edición: Susana Kuncar.

 

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